El nuevo mundo

¡Cómo ha cambiado el mundo en tan solo unos años! Miro hacia atrás, hace 5 años, y las cosas son completamente distintas a lo que fueron durante toda mi vida.

Yo nací el año en que la Union Soviética dejaba de existir, y el mundo entero entraba a un orden global unipolar. 30 años después, este orden colapsó, y hoy en día vemos al mundo de una manera muy distinta. Al mismo tiempo el cambio sigue en proceso, y la transición sigue en curso. Lo que alguna vez fue un imperio aún tiene cartas en su mano, y está decidido a conservar una parte del gran botín que dejó al descubierto.

Para mi lo más relevante de la caida del imperio es el cambio de perspectiva que ello ha traído. Como dije,toda mi vida había existido una sola realidad, digámoslo así, y ahora de pronto se abre ante mi un abanico de realidades e interpretaciones ante los cuales palidece la narrativa estándar que había consumido hasta entonces. Es cierto que ya cuestionaba yo muchos de sus argumentos, así como también empezaba a mirar, desde dentro, las contradicciones internas y las primeras grietas de su desmoronamiento. Es absurdo decir que no las veíamos ya todos, de hecho. Pero mucha gente se mantenía (y muchos aún hoy siguen con esta actitud) en tratar de sostener a toda costa esta estructura colapsante.

He de decir que la propia era que está aún acabando sembró las simientes del nuevo mundo. Puedo imaginar que el internet, de origen anglo-imperial*, abrió las puertas al torrente de interacción entre culturas, y tal vez por ello pueda encontrar su redención. El anglo-imperialismo ha sido y es una de las mayores catástrofes que ha experimentado no solo la humanidad, sino la vida misma en la tierra.

El nuevo orden, sin embargo, aún no se ha acabado de definir. A este drama que se ha desenvuelto en los recientes 5 años todavía le quedan algunos actos. Por lo que se ve, se acercan años de guerras y crisis políticas, y, una vez más, la amenaza de la guerra nuclear se cierne constante sobre nosotros. Tan solo estos últimos dos años, he visto por lo menos cuatro veces hablar de una posible escalada nuclear, en memes, noticieros amarillistas, y aún en medios "oficiales". Es interesante pensar que lo que alguna vez se llamó "generación de cristal", ahora está acostumbrada a las constantes amenazas de guerra nuclear, a la sobreexplotación laboral, a las crisis políticas, a las noticias de genocidio, etc.

Hablando de las noticias de genocidio, ¿alguien se ha dado cuenta que los mismos que alguna vez fotografiaron el cadáver de un niño de 2 años en las playas de Italia, e hicieron gran escándalo de ello, no están al tanto de un genocidio que está ocurriendo no muy lejos, justo en el mediterraneo? No se, es extraño. El gran cambio de paradigma que en un brusco giro descartó el llamado "woke" por el apoyo al genocidio es algo que me tiene francamente anonadado. Vamos, que analizándolo, no tiene nada de raro, si nos fijamos que todas estas corrientes no han sido otra cosa que instrumentos del euro-imperialismo que desde hace 500 años viene imponiendo sus racionalizaciones como verdades absolutas y fundamentales, pero sobre todo superiores. A fin de cuentas, si examinamos las narrativas de los últimos 500 años, veremos que en todo el mundo se ha impuesto el modo de pensar, siempre asumiendo como axioma su propia superioridad sobre todos los seres y formas de pensar de la tierra. Esto no es nada nuevo, todo imperio hace eso. Mas el imperio "occidental" lo ha hecho no solo a escala global, sino también de una manera devastadora que ha prácticamente acabado con muchas de las grandes culturas de su época, y las que han sobrevivido se han visto fundamentalmente alteradas. Parte del gran cambio de época que se está llevando a cabo es el rechazo generalizado por el "proyecto moderno" por gran parte del mundo. Menos, por supuesto, por los eurodescendientes diseminados por todo el mundo, aquellos cuya principal, y a veces única, herencia cultural es precisamente la de su propia superioridad y la acompañante desestima de los pueblos, las culturas, y las gentes del resto del mundo. Ellos, gozando aún de gran parte de la energía acumulada durante el "medio milenio europeo", hacen todo por conservar el dominio sobre todos los recursos del planeta.

Pero, a todo esto, ¿qué hacer? ¿Podemos creer que existe algo que podamos hacer a la luz de los acontecimientos, que podamos hacer algo significativo para contribuir a los cambios que a todos nos gustaría ver? Resulta curioso que, ahora que es el mejor momento para buscar realizar cambios que puedan alterar el estado de las cosas, es cuando más nos decidimos a mantener el viejo sistema que no nos está favoreciendo. Me pregunto por qué será. Pero si el nuevo mundo es diferente del viejo mundo, entonces, ¿no resulta absurdo adherirse a un modelo en decadencia, en lugar de buscar un lugar en el mundo que se viene? Es cierto que nadie puede anticipar el futuro, por lo cual es cierto que lo que ha venido funcionando bajo el antiguo orden no seguirá funcionando de igual manera. Conociendo a mis lectores como los conozco yo, asumo que son gente pensante que no solo ha visto la máscara del imperio caerse por completo frente a nuestros ojos, sino que también había vislumbrado desde hace tiempo qué se atisbaba detrás de ella, una visi´on repugnante que cada vez resulta más difícil de mirar por largo tiempo.

Si quisiera podría extenderme indefinidamente, pero me gustaría solo agregar con esto una exhortación a buscar hacer los cambios fundamentales que cada quien considere necesarios en este cambio de era, con coraje y valor. A sembrar las semillas del nuevo mundo al que, tarde o temprano, vamos a regresar, y que es nuestra única herencia.

O algo.

[En este punto dejo la presente perorata, con la promesa de continuar con mis ruminaciones en un... tiempo futuro.]